¿Cómo decorar la mesa de Navidad?
La mesa de Navidad se caracteriza por estar decorada con más profusión de objetos que una mesa para cualquier otra celebración.

protocolo.org
Sugerencias para decorar la mesa de Navidad
La decoración de la mesa de Navidad corre a cargo de los anfitriones. Ellos son los que eligen el tipo de mesa y estilo de la decoración que quieren para esa ocasión.
En una época tan especial del año como es la Navidad, la mesa también debe ser 'especial'. Estas fechas navideñas nos permiten jugar con todo tipo de colores y adornos, aportando nuestro propio toque personal. Adornos y composiciones sin llegar a la exageración o el mal gusto.
En las fiestas navideñas nos solemos decidir por decoraciones temáticas, muy propias de estas fechas, pero hay muchas otras opciones. No es obligatorio quedarse con el rojo y el verde, los que parecen ser los colores 'oficiales' de la Navidad.
Sean cual sean los adornos elegidos, debemos tener en cuenta que la decoración en la mesa no debe formar barreras entre los invitados. Por lo tanto, no es correcto poner centros de mesa u otros adornos de más de unos 20-25 centímetros de altura.
Tampoco los elementos ornamentales dispuestos en la mesa deben molestar o estorbar a los comensales. Ni deben interferir tanto a la vista (brillos, reflejos...) ni a otros sentidos, como el del olfato.
Te puede interesar: El orden de los comensales en la mesa de Navidad (con vídeo)
Si colocamos un centro de mesa navideño, no debería ocupar demasiado espacio en la mesa. El centro de mesa mejor acorde, en tamaño y forma, al tamaño y forma de la mesa. Hay que mantener una cierta sintonía y proporcionalidad.
Es muy típico en estas fechas colocar velas en la mesa, bien en candelabros, palmatorias u otros soportes. Si las queremos tener encendidas deben encenderse antes de empezar a cenar. Y si no las queremos tener encendidas durante la cena, hay que apagarlas antes de comenzar a cenar.
El centro de mesa es parte de la decoración y no lo debemos tocar ni desarmar. No es correcto ni apropiado quitarle algún elemento al centro de mesa. Además, es muy probable que sea el centro utilizado para todas las celebraciones navideñas. No lo estropeemos.
La decoración de una mesa de Navidad puede hacerse con figuras y otros elementos decorativos. No es 'obligatorio' que sea un centro de mesa, la única decoración permitida.
Las servilletas, como excepción, se pueden doblar de forma artística, pero solo en esta ocasión. La Navidad y otras fechas especiales, 'permiten' tomarse este tipo de licencias.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
La cortesía no debe perderse amparándonos en las prisas y la vida tan acelerada que hay en las grandes ciudades. Los gestos de cortesía mejoran la convivencia
-
Los niños deben aprender a comportarse bien cuando se encuentran fuera de casa, tanto en la calle como en cualquier establecimiento público
-
Una visita puede tener múltiples finalidades, pero no debe confundirse con otros actos sociales de mayor entidad
-
En el transporte debemos diferenciar el largo recorrido del trayecto corto. También hay que tener en cuenta las normas de cada empresa de transporte
-
La figura del acomodador y el servicio de guardarropa apenas se ven ya nada más que en algunos teatros y recintos para espectáculos
-
La duración de la visita depende mucho de la finalidad de la misma. No es lo mismo visitar a un enfermo que ir de visita a casa de un amigo o familiar
-
Los espacios públicos, como su nombre indica, son para compartir y disfrutar, pero no para estropear o deteriorar. Por esta razón, hay que dejarlo todo igual o mejor de lo que estaba para que puedan disfrutarlo otras personas
-
Los cubiertos no se colocan en la mesa de forma aleatoria. Hay que seguir unas reglas muy básicas.
-
El uso de las manos en la mesa debe ser limitado a ciertas cuestiones relacionadas con la comida
-
Cuando llamamos a otra persona puede que no la encontremos en su domicilio u oficina. Dejaremos recado para que nos devuelva la llamada
-
Cambiar un regalo no debe ser un acto de puro capricho. Los regalos se pueden cambiar siempre que haya una buena razón
-
Un espectáculo en directo suele ser, en la mayoría de los casos, merecedor del agradecimiento del público, que lo expresa mediante los aplausos y aclamaciones











