
¿Cómo actuar en el automóvil cuando llevamos pasajeros?
Cuando viajamos en un automóvil con más personas hay que actuar de forma prudente y educada porque estamos compartiendo un espacio con otras personas
protocolo.org - FP Pro
Consejos para comportarse de forma correcta en automóvil
Si llevamos a otras personas en el coche ¿es correcto poner la calefacción, abrir la ventanilla, poner la música que queramos, etcétera?
Cuando se comparte un espacio con otras personas, en este caso un coche, hay que poner unas mínimas reglas de comportamiento para evitar conflictos y posibles desavenencias.
Aunque seamos los dueños del automóvil, no podemos -ni debemos- hacer lo que queramos cuando llevamos otras personas a bordo. Las buena educación dicta que debemos consensuar algunas mínimas reglas que todos deberían respetar. Además hay que hacerlo antes de emprender un trayecto, por si alguien no está de acuerdo.
Un ejemplo muy claro. El tema del tabaco. Si dejamos fumar en el coche, lo tiene que saber todo el mundo. Porque puede que haya alguien al que le moleste y debe saberlo antes de emprender un viaje.
Te puede interesar: Cómo no perder los buenos modales al volante (con vídeo)
Establecer estas pequeñas normas previas al viaje puede evitar muchos problemas posteriores. Incluso, es posible que alguno de los viajeros prefiera 'quedarse en tierra' por no estar de acuerdo con esas normas.
No imponer. Un conductor con un mínimo de educación, aunque el vehículo sea de su propiedad, no debe subir la música o poner la música que él quiera. No debe subir o bajar la ventanilla a su antojo. No debe poner la calefacción a su gusto, sin preguntar al resto de pasajeros, etcétera, etcétera.
Cuando se comparte el espacio de un coche, nos guste más o menos, hay que solicitar la opinión de los demás pasajeros, para que todos, de forma consensuada puedan ir a su gusto dentro de automóvil. La imposición puede ser causa de muchos conflictos y enfados. Es mejor el diálogo y la comprensión.
En algunos casos puede ser razonable una propuesta individual, aunque no sea compartida por los demás. Todo es cuestión de hablarlo y ponerse de acuerdo, pero sin discutir ni crear polémicas innecesarias.
Resumiendo, es mejor dejarlo todo bien claro antes compartir viaje o trayecto con otras personas. ¿Se puede comer o fumar en el coche? ¿Cuántas paradas se van a hacer?...
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Los regalos que nos hacen no se deben regalar de nuevo para cumplir un compromiso social. Es mejor donarlos para una buena causa o guardarlos, si no nos gustan
-
La cantidad de comida a servir por cada comensal debe ser prudente y proporcionada a la que deseamos comer
-
Calcular de forma precisa la cantidad de alimentos y bebidas para una fiesta supone un ejercicio de práctica y cálculo matemático. Hay unas medidas establecidas aunque los anfitriones pueden tener, por experiencia, sus propias reglas
-
En un transporte público, al igual que en otros lugares, hay que guardar ciertas reglas de comportamiento
-
El lugar de la celebración de una boda es elegida, por regla general, por los novios.
-
Los cubiertos no se colocan en la mesa de forma aleatoria. Hay que seguir unas reglas muy básicas.
-
Llegó la hora de la entrevista. La entrada al despacho del entrevistador es un pequeño ¡examen' de nuestros buenos modales y nuestra buena educación. Es una de las primera pruebas de la entrevista
-
Actualmente no hay una definición o medida estándar que nos indique las medidas ideales de un plato para la mesa porque...
-
Hablar en un transporte público es algo habitual, aunque no siempre lo hacemos de forma correcta y educada. Es relativamente habitual escuchar tonos de voz muy altos
-
Hay preparaciones de platos que requieren una salsa como complemento imprescindible para su correcta degustación
-
La invitación es un documento de "entrada" a una ceremonia o celebración, por lo que es apropiado llevarla siempre
-
Los invitados a una fiesta no deberían verse involucrados en las labores de limpieza, salvo que sea una fiesta o celebración con amigos o familiares de mucha confianza