Los gestos y los hábitos. Costumbres
Los gestos moderados en unión con las palabras y a la vez dulcemente cómicos, espirituales y graciosos, son permitidos y aún indispensables
Los gestos y la conversación
Aquella urbanidad
Hacer una pantomima a cada palabra que se pronuncia es una cosa casi intolerable. Los grandes o multiplicados gestos que no están en armonía con el discurso; los signos misteriosos para enunciar la idea más sencilla; los gestos bruscos en una conversación amistosa; los movimientos rápidos en una persona bien esté sentada o en pie, a manera de los giros de un baile, son a la vez graves faltas contra la razón y el buen gusto.
No es esto decir que queramos proscribir los gestos o acciones que como dice el poeta Debille "dan fisonomía al discurso". Los gestos moderados en unión con las palabras y a la vez dulcemente cómicos, espirituales y graciosos, son permitidos y aún indispensables.
La mano izquierda puede no moverse, pero jamás debe fallar a la conversación la cooperación inteligente y regulada de la mano derecha, y es muy ridículo ver que mientras hablan algunos conservan sus manos metidas en los bolsillos o cruzadas sin imprimirles ningún movimiento. Estos se parecen a los autómatas, como los gesticuladores se asemejan a energúmenos.
Te puede interesar: El arte de conversar y saber escuchar (con vídeo)
Las personas que al hablar se apoyan fuertemente sobre el brazo de su sillón o butaca, que juegan con los objetos que tienen a la mano, que se distraen rayando los muebles, dan mil vueltas a su sombrero, juegan con los pañuelos o hacen cosas parecidas, ignoran que opuestas son a las prescripciones de la buena educación estas muestras de familiaridad y puerilidad.
Añadiremos de paso, que los testigos de estos actos ridículos, deben evitar el dar a conocer que se han apercibido de estas faltas, y mucho menos reírse y hablar por lo bajo.
Los hábitos o costumbres
En la intimidad de la familia se permiten, lo general de las personas, una multitud de licencias que llevadas luego a la sociedad por la fuerza del hábito, revelan una mala educación:
- así quitarse un guante en visita y distraerse en estirarle;
- levantar el vestido por la parte anterior por preservarle de un fuego o calor demasiado vivo, o bien sacar el pañuelo con el mismo objeto;
- manifestar enfado o mal humor;
- jugar mientras se habla con los niños o los animales;
- apoyar la cabeza contra la chimenea, menear el fuego o introducir carbón con frecuencia;
- referir con pesadez algunas ligeras indisposiciones que se padezcan;
- quejarse frecuentemente de la temperatura repitiendo según la estación; ¡Qué calor hace! ¡qué frío tan crudo!
Son defectos que no recomiendan nada a las personas.
-
4592
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
¿Pero a quién se le ocurre relacionar dos elementos tan discordantes como son la etiqueta y el fútbol? Lo cierto es que aunque con matices y acentos diferentes...
-
La forma de caminar influye de manera importante en nuestra imagen
-
El auge del llamado mundo manga y mundo anime ha llevado a la creación de espectáculos llenos de luz, color y música que 'vuelven locos' a los jóvenes
-
¿Qué puede hacer una persona cuando tiene dos eventos o compromisos en el mismo día y en un horario idéntico o parecido?
-
Consejos de etiqueta para las cajas de autopago de los supermercados. Cómo usar una caja de autopago
Las nuevas tecnologías cada vez están más presentes en nuestro día a día. Ahora, también las empezamos a ver a la hora de pagar -
Las personas vanidosas son aquellas que se sienten superiores a los demás, que suelen despreciar a casi todo el mundo
-
Loa aviones, aunque parecen muy grandes por fuera, no lo son tanto por dentro. Los espacios reducidos con mucha gente en ellos no suelen ser muy fáciles de gestionar si no nos comportamos de forma educada y seguimos algunas reglas
-
Una de las manifestaciones más comunes del lenguaje políticamente correcto es el reconocimiento explícito de la diferencia de género
-
La dependencia sana es una pieza fundamental en nuestras relaciones con la sociedad y con las personas que conviven en ella
-
Los moralistas de todas las épocas se rasgaron siempre las vestiduras ante lo que consideraban como la pérdida de los valores y la disipación de las buenas formas
-
Las formas de cruzar las piernas las mujeres suelen ser diferentes a la forma en la que lo hacen los hombres
-
Unas buenas relaciones personales y sociales son las responsables de una vida responsable y poderosa