
Los gestos. Las manos y la cara. Lenguaje no verbal. Concordancia gestual
Gesticular mientras se habla. El lenguaje no verbal de sus manos y su cara. Qué dice su cuerpo. El uso correctos de los gestos. Exposición y gestos
foto base PhotoMIX-Company - Pixabay
Los discursos y el lenguaje no verbal
No solo comunican las palabras
Los gestos son una parte muy importante de cualquier tipo exposición, charla o conferencia. Con los gestos podemos atraer la atención o lograr el efecto contrario. Todo depende del buen uso que hagamos de los gestos y de las formas no verbales de comunicar.
Generalmente, opinan los expertos, un abuso en el uso de los gestos, da una imagen negativa del individuo. Se toma menos en serio lo que dice. En pocas palabras, la persona que gesticula mucho, es tomada poco en serio. Es considerada más un "charlatán" o alguien que no domina el tema como debería.
Los gestos, no dejan de ser una "explicación gráfica" de algo; por esta razón los gestos deben ser "adecuados" a lo que estamos hablando, siempre siendo moderados en su uso. Ambos extremos son malos -abuso de gestos o permanecer inmóvil como si fuésemos una estatua de mármol-.
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Nuestro cuerpo 'habla' por sí solo
Hay que tener en cuenta, que todo nuestro cuerpo 'habla', no solo las manos. La boca, los ojos, los brazos, las piernas... tratar de disimular, no siempre es una buena solución. Podemos mentir con la boca, pero nuestros ojos, nuestra cara, etcétera pueden decir lo contrario. No es fácil "fingir" con los gestos.
En todo momento hay que tratar de ser naturales y expresivos, pero no debemos fingir o 'camuflar' lo que decimos con gestos que no se corresponden. Cuando no hay una concordancia entre lo que decimos y los gestos o poses de nuestro cuerpo, se puede generar una cierta desconfianza en el público.
Los gestos son el 'aderezo' de las palabras. Tanto el exceso como la escasez de gestos puede perjudicar al mensaje que queremos transmitir.
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