Regalo lo que me regalan. ¿No es de mala educación?
Los regalos que nos hacen no se deben regalar de nuevo para cumplir un compromiso social. Es mejor donarlos para una buena causa o guardarlos, si no nos gustan
No es muy elegante ni apropiado regalar lo que te han regalado
Regalar lo regalado no se debe hacer, salvo algunas excepciones. No es de buen gusto. Ahora bien, que no se deba hacer no quiere decir que no se haga. Se hace mucho más a menudo de lo que pensamos.
Los regalos que se hacen de esta manera -regalos regalados- pueden acarrearle algún que otro pequeño disgusto o ponerle en una situación embarazosa. ¿Por qué razón?
1. Puede aparecer en casa de otra persona que sea amigo común de los dos -¿no le suena ese jarrón, esas copas, esa cubertería ...?-.
2. También puede que le vuelva ese regalo a una persona que ha hecho lo mismo que usted (en este caso habría que aplicar el refrán: "donde las dan las toman").
3. O bien, puede que un día le pregunte su amigo o familiar por el objeto que le regaló, por poner algunos ejemplos.
Es mejor guardar un regalo en el trastero o en el garaje, que deshacerse de él. No quedaría muy bien si se entera la persona que hizo el regalo que ha ido a parar a casa de un amigo común, a una casa de venta de objetos de segunda mano, o aún peor, que ha acabado en el contenedor de basura. Del trastero o garaje siempre se puede rescatar.
Por último, hay una buena opción, que a casi nadie le iba a parecer mal. Donar el regalo para una causa benéfica o una buena causa similar. Pero mejor olvidarse de regalarlo para cumplir un compromiso social como una boda, comunión, cumpleaños, etcétera.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Una pedida de mano puede consistir en tomar simplemente un café o merienda, o ser algo de mayor entidad, como un almuerzo.
-
Cuando compartimos un espacio con otras personas hay que ser respetuosos y civilizados
-
Un espectáculo en directo suele ser, en la mayoría de los casos, merecedor del agradecimiento del público, que lo expresa mediante los aplausos y aclamaciones
-
El orden para bajar de un automóvil es importante si queremos tener un gesto de cortesía con nuestros pasajeros
-
En la cocina alguna veces no salen las cosas como teníamos previsto. Es bueno contar con un plan B. Si no tenemos otra opción, podemos recurrir a un servicio de comida a domicilio como último recurso
-
El paraguas puede dejarse en un paragüero o llevarlo con nosotros. Todo depende del tipo de establecimiento al que entremos
-
Los espacios públicos, como su nombre indica, son para compartir y disfrutar, pero no para estropear o deteriorar. Por esta razón, hay que dejarlo todo igual o mejor de lo que estaba para que puedan disfrutarlo otras personas
-
Cuando llegamos a una fiesta o celebración y nos encontramos con varias personas en un grupo puede surgirnos la duda de a quién debemos saludar primero
-
Los regalos se hacen por cortesía y es una forma de agradecer una invitación. En ocasiones, los regalos gastronómicos pueden trastocar un poco los planes de los anfitriones para ese encuentro o celebración
-
Los anfitriones deben "vigilar" que todo esté en perfecto estado. Así todo pueden cometerse algunos errores que se escapan de su control por un despiste o descuido
-
Los novios son los protagonistas principales de una boda, por lo que no es correcto querer destacar más que ellos para ser el centro de atención del resto de los invitados
-
Las conversaciones y los anfitriones son muy importantes para mantener 'viva' cualquier tipo de celebración o encuentro