Hora de irse. ¿De quién debemos despedirnos cuando hacemos una visita?
Al terminar una visita no podemos marcharnos "a la francesa". Es decir, no hay que irse de una casa sin despedirse. Al menos, de los anfitriones
Es hora de hacer las despedidas. Nos despedimos de todo el mundo, solo de los anfitriones
¿Qué debemos hacer a la hora de despedirnos cuando hacemos una visita?
Al terminar una visita, generalmente, solo nos tendremos que despedir de los anfitriones. En la mayoría parte de las ocasiones, estaremos a solas con ellos. Una visita no es una fiesta donde suele haber muchos invitados.
No obstante, si en la sala hay más personas, nos debemos despedir de todas ellas, agradeciendo la compañía y la conversación. Nada de pararse con cada persona mucho tiempo haciendo esperar a nuestros anfitriones que estarán esperando para acompañarnos hasta la puerta.
Si queremos hablar con alguien de forma más 'prolongada' quedaremos en hablar para concretar un encuentro posterior. No es el mejor momento durante la despedida para iniciar una conversación.
Te puede interesar: Cómo recibir a las visitas y atender a los invitados
La despedida se suele hacer del mismo modo a como se hizo el saludo o las presentaciones. Es decir, si saludamos con un beso en la mejilla, dando la mano, dando un abrazo... la despedida debe ser con el mismo 'estilo' a como hicimos el saludo, remarcando el grado de amistad o confianza con esas personas.
Cuando los anfitriones tienen más invitados, debemos rogarles que no es necesario que nos acompañen para que no tengan que dejar solos a sus invitados. El simple gesto de hacerlo (con la intención de hacerlo vale) es suficiente.
Si los invitados son muy mayores o de cierta relevancia, acompañarles hasta la puerta es una 'obligación no negociable' para los anfitriones. Los invitados de los que se despiden, si están sentados, deberían ponerse de pie.
Por último, las despedidas deben ser breves y 'únicas'. ¿Por qué decimos esto? Porque hay personas que se despiden varias veces pero no se van. Acaban hablando con otras personas, tomando otra copa, etc.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Compartir un paraguas tienes sus reglas de cortesía. Responde más a cuestiones prácticas que a una simple regla de cortesía, que también debe tenerse en cuenta
-
El número de copas a poner en una mesa depende de varios factores. Entre ellos, de los tipos de vinos que se van a servir
-
Los invitados deben tener un comportamiento correcto en todo momento. Los buenos modales son imprescindibles para acudir a cualquier tipo de evento o celebración
-
Un enlace matrimonial conlleva, dependiendo del lugar donde se celebra, una serie de tradiciones o costumbres típicas.
-
En el momento de presentar a dos personas hay algo más que un simple saludo. Hay un intercambio de información básica sobre cada uno de ellos
-
Los animales de compañía no deben acompañarnos en las visitas, salvo que se hagan a familiares o amigos que sabemos que les gustan
-
El uso de la camiseta suele ser objeto de polémica, sobre todo en el entorno de playas, piscinas, ríos...
-
Las tradiciones en las bodas juegan un importante papel antes, durante y después de la ceremonia
-
Los espacios públicos, como su nombre indica, son para compartir y disfrutar, pero no para estropear o deteriorar. Por esta razón, hay que dejarlo todo igual o mejor de lo que estaba para que puedan disfrutarlo otras personas
-
El tema del vestuario y del buen tiempo desata la polémica entre los más conservadores y los que optan por incorporar nuevas costumbres o comportamientos.
-
La duración de la visita depende mucho de la finalidad de la misma. No es lo mismo visitar a un enfermo que ir de visita a casa de un amigo o familiar
-
En la época veraniega también hay que cumplir con los compromisos que surjan.