¿Cuánto tiempo debe durar una fiesta? Cuál es la duración media de una fiesta o celebración
La duración de una fiesta debe ser la que estimen oportuna los anfitriones, con el debido respeto a los invitados que participan en ella
La duración de la fiesta. ¿A qué hora debe empezar? ¿A qué hora debe terminar?
La duración de una fiesta no se rige por una norma o regla escrita. Es muy variable en función de diversos factores. Veamos algunos de estos factores que pueden influir en la duración de una fiesta o celebración.
1. La edad de los invitados. No es lo mismo estar de fiesta con amigos jóvenes, que una celebración con personas más mayores como los abuelos, los padres -si son mayores- y otros amigos y familiares de una 'cierta edad'. A mayor edad de los invitados, más corta debe ser la duración de esa celebración.
2. El lugar de la celebración. Si estamos en una casa particular, habrá que tener en cuenta, además del propio horario de los anfitriones, el de los vecinos. No se puede molestar al vecindario a horas intempestivas. En cambio, si la celebración es una finca, hacienda o espacio donde no hay vecinos, o están muy alejados, la celebración puede ser más larga.
Te puede interesar: Fiestas y eventos sociales. Tipos de fiestas. Reglas de comportamiento
3. El horario de la fiesta o celebración. Las celebraciones, que se hacen al mediodía, se pueden prolongar algo más en el tiempo sin molestar a nadie. Las celebraciones por la noche, aunque también pueden ser largas, muy largas, pueden ocasionar mayores molestias. Hay que ser muy cuidadosos en ambos casos.
4. El motivo de la celebración y tipo de fiesta. Hay bastantes diferencias entre una simple cena, donde se charla mientras se degustan los alimentos y se hace una sobremesa, más o menos larga, que una fiesta donde se toma algo de picar, hay baile, música y todo tipo de 'juegos' o actividades. Cada tipo de fiesta o celebración puede tener sus propios horarios y su duración.
5. El componente cultural o tradicional. Este factor suele tener una mayor o menor influencia en función del tipo de celebración. Por ejemplo, una celebración de una boda. Los usos sociales y tradiciones pueden ser determinantes para que la duración sea mayor o menor en función de esas costumbres. Hay celebraciones de boda que duran varios días.
La hora de comienzo de una fiesta o celebración es lo que más claro está siempre. Si nos invitan de forma escrita, figurará en la invitación. Si nos invitan de forma verbal, nos dirán a qué hora comienza todo. Aunque siempre hay que ser puntuales, cuando se organiza algo en casa, la hora de llegada de los invitados puede ser más escalonada, para que los anfitriones puedan recibir a sus invitados adecuadamente, sin 'atascos'.
Resumiendo, la duración de muchas fiestas y celebraciones depende de lo a gusto que se encuentren los invitados. Salvo en los casos de celebraciones en establecimientos de hostelería o similares, que tiene sus horarios, en el resto de los casos pueden ser muy variables.
Una cosa más. Si los anfitriones demuestran un cierto cansancio, los invitados tienen que tener un cierto sentido de la prudencia y retirarse. Si hay mucha confianza, pueden ser los propios anfitriones quienes manifiesten sus ganas de dar por terminada la reunión. Hay que saber ser buen anfitrión, pero también hay que saber ser buen invitado.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Compartir un paraguas tienes sus reglas de cortesía. Responde más a cuestiones prácticas que a una simple regla de cortesía, que también debe tenerse en cuenta
-
Los compromisos sociales nos hacen acudir a fiestas en las que, en ocasiones, apenas conocemos a nadie
-
La cortesía del conductor conlleva tener ciertas atenciones con sus pasajeros, con independencia de la edad o el género
-
Como invitado, salvo excepciones, no es habitual tener que colaborar en la organización de una fiesta o durante su desarrollo
-
La pedida de mano es un acto privado que puede celebrarse en distintos lugares
-
El vestuario a lucir depende de los requisitos marcados por los anfitriones. Cada familia puede tener sus propias 'exigencias'
-
Tropezar en el metro o en cualquier otro transporte público con otra persona es algo relativamente frecuente, sobre todo en las horas punta
-
Hay edificios donde los ascensores suelen estar muy ocupados por el gran número de personas que los utilizan, sobre todo a determinadas horas
-
Los horarios están para respetarlos, porque no se ponen por puro capricho. Los horarios ayuda a organizar mejor los movimientos y otras actividades que hay dentro del camping, como la llegada de nuevos campistas o la marcha de otros
-
La llegada del buen tiempo, aunque no sea una condición necesaria, anima a celebrar alguna que otra fiesta con los amigos u otras personas.
-
Una cosa es "relajar" ciertas normas de educación; otra cosa es perder los buenos modales, o dejarles en casa de vacaciones. Los buenos modales no se van de vacaciones
-
Hay una gran diferencia entre ocupar un lugar y conquistarlo. Llegar a un espacio como el de un camping requiere de cierta prudencia y orden para no causar molestias al resto de campistas