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Curso protocolo social. La mesa de principio a fin. Lección 1: el mantel (con vídeo explicativo)

Cómo elegir el mantel perfecto: tamaño, color y estilo para cualquier tipo de celebración

Se lee en 3 minutos.

Vestir la mesa es una parte importante del montaje de una mesa
Curso protocolo social Poner la mesa de principio a fin El mantel. Vestir la mesa es una parte importante del montaje de una mesa

El mantel en la mesa. La guía definitiva para lograr una presentación impecable

Comenzamos una serie de vídeos explicativos en los que vamos a ver cómo poner una mesa desde el principio hasta el fin, dando todo tipo de trucos y detalles interesantes. Queremos que sea el curso gráfico más completo que haya en internet sobre el tema de poner la mesa y todo lo que ello conlleva.

Cómo poner el mantel en la mesa

El mantel es el vestido de la mesa. Como cualquier vestido debe adaptarse a la forma y tamaño de la mesa. Elegir la 'talla' correcta del mantel, como la de cualquier prenda de ropa, es importante para que la mesa quede bien elegante y apropiadamente vestida.

Los colores claros, sobre todo el blanco o algún tono similar como el blanco roto, suelen ser los más utilizados. Pero dependiendo de la celebración puede ser diferente. Sobre todo cuando hablamos de celebraciones temáticas. En estos casos, no solo pueden ser colores más fuertes, sino que pueden llevar todo tipo de estampados. Uno de los ejemplos más claros son los manteles de Navidad.

Una vez escogido el mantel más apropiado, debemos colocarlo en la mesa de manera que ni llegue al suelo, ni se quede en plan "minifalda". Es decir, que deje ver al completo las patas de la mesa. Es imprescindible que cubra la totalidad de la superficie de la mesa.

¿Cuál es la altura correcta que debe tener el mantel en una mesa?

Depende. No es lo mismo poner un mantel en casa o un restaurante, que montar una mesa para un banquete. No hay un estándar definido. Pero si existen unos usos comunes que podemos considerar como referencia.

El mantel debe cubrir, al menos, un tercio de la altura que hay desde la mesa hasta el suelo. Una de las mejores opciones es que cubra dos tercios del espacio entre la mesa y el suelo. Un truco muy sencillo: la falda del mantel debe caer un poco por debajo de la altura del asiento-silla. Esta regla sirve para la mayoría de las ocasiones.

Cuando hablamos de banquetes es habitual que las mesas se cubran con manteles hasta el suelo o muy cerca de él. Con este tipo de manteles hay que tener cuidado de no pisarlos, porque algunos llegan hasta al suelo. Si lo pisamos corremos el riesgo de armar un buen estropicio si el mantel se mueve y caen muchas de las cosas que hay puestas en la mesa.

A la hora de sentarnos, el mantel no lo debemos dejar sobre nuestro regazo, como si fuese nuestra servilleta, sino meterlo hacia el interior de la mesa sin 'arrastrarlo' con nuestras rodillas, sino dejándolo deslizarse suavemente. Si lo 'arrastramos' puede ocurrir lo mismo que si lo pisamos, podemos mover o hacer caer muchos de los elementos que hay en la mesa. Sobre todo las copas, que suele ser las más inestables y frágiles.

En algunos banquetes, no es el mantel el que llega hasta el suelo. Se suelen cubrir las mesas con una pieza de tela hasta el suelo -incluso de color distinto al del mantel- y luego se coloca el mantel encima.

Consejos para poner el mantel de forma elegante y correcta en una mesa

Puedes ver más vídeos sobre protocolo en nuestro canal de Youtube: Protocolo y Etiqueta

 

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