Cómo aparentar seguridad y dominar las situaciones (con vídeo)
A todo el mundo le gusta presentarse seguro, confiado y tranquilo ante la mayoría de las situaciones que se nos presentan en la vida

fotogra,a RTVE - Chico nuevo en la oficina
Consejos para afrontar las diversas situaciones y contextos con seguridad
Hay muchas ocasiones en nuestra vida diaria donde nos gustaría presentarnos seguros, confiados y tranquilos; cuando tenemos que hablar en público, cuando tenemos que ver a un cliente, cuando vamos a conocer a la familia de nuestra pareja, etcétera. Pero no siempre resulta ser así. Nos ponemos muy nerviosos, incluso en las horas previas.
Una de las mejores técnicas es mentalizarse de nuestro potencial, Apoyarnos con pensamientos positivos. Tratar de controlar nuestras emociones, nuestros gestos y nuestros movimientos.
Una cosa importante es no exteriorizar los nervios o las tensiones. No hay que dejarlas salir al exterior para que los demás puedan percibir esta inseguridad.
Puntos clave para aparentar tranquilidad
Si queremos aparentar tranquilidad tendremos que aprender a:
1. La posición del cuerpo. Mantener una posición erguida. Tanto si estamos sentados, como si estamos de pie. Una posición encorvada o recogida puede transmitir timidez e inseguridad.
2. Los movimientos. Sobre todo al caminar. Caminar en círculos o balancearse pueden ser movimientos que denotan cierta intranquilidad.
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3. Los gestos. Si hacemos muchos gestos y aspavientos podemos demostrar nerviosismo. Pero hay otros muchos como colocarse bien las gafas, tocarse la barba o el pelo, anudarse o apretarse bien el nudo de la corbata, rascarse, etcétera.
4. La expresión del rostro. Un rostro tenso denota nerviosismo, incomodidad. Por ejemplo, apretar los labios o la mandíbula. También, apretar los dientes.
5. El habla. Si hablamos muy rápido puede ser porque estamos nerviosos e intranquilos. O todo lo contrario, si nos quedamos callados, también puede ser un indicio de nervios, porque noes hemos quedado en blanco.
Cita o entrevista de trabajo
Antes de llegar a una cita o entrevista debemos 'mentalizarnos', como dijimos al principio, con mensajes positivos, adoptando una postura erguida de nuestro cuerpo, caminando con paso firme y decidido, etcétera.
Importante: no interrumpir a la otra persona. Hay que dejarla terminar sin interrupciones que pueden denotar nuestra ansiedad, nuestro nerviosismo. Hablar despacio y escuchar activamente.
Teresa Baró, experta en comunicación no verbal y colaboradora habitual del programa de RTVE "A punto con la 2" nos da una serie de consejos para ayudarnos a tener mayor seguridad en las situaciones que nos pueden incomodar o poner algo nerviosos.
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