¿Qué ha pasado con las buenas maneras?
Las buena maneras han sido, y deberán seguir siendo, el límite entre la civilización y la barbarie
¿Qué ha pasado con las buenas maneras?
Este retorno a la barbarie al que parece estamos asistiendo se ha llevado de encuentro a las buenas maneras. Los padres, más interesados en hacer dinero, o en sobrevivir a la crisis económica, pasamos cada vez menos tiempo con los hijos y, por lo mismo, no tenemos ocasión para enseñarles a comportarse como personas.
Yo no olvido como mi padre, mi madre o mi hermana mayor, me insistían en que no hablara con la boca llena, masticara despacio y con la boca cerrada, no me sirviera más que lo que me iba a comer, no interrumpiera las pláticas de los mayores, no hiciera ruido con los cubiertos y no pusiera los codos sobre la mesa. También recuerdo cuanto me repitieron que me cubriera la boca cuando bostezaba, usara el pañuelo cuando estornudaba y no olvidara nunca el "gracias", el "con permiso" o el "por favor". Y no vivía en la corte de ningún rey, sino en mi casa de la semirural Juticalpa. Porque estaba, y sigue estando, claro que no hace falta ser ciudadano del primer mundo ni tener grandes medios materiales para no comportarse como bestia.
La conducta ética casi siempre se identifica con la práctica de las virtudes humanas más notables: la justicia, la responsabilidad, el respeto o la prudencia; sin embargo, lo cierto es que hay una serie de virtudes menudas que dan sentido humano a la existencia, que la vuelven más grata y que están a la mano de cualquier mortal.
Te puede interesar: La importancia de los buenos modales en la educación
Si la Ética nos lleva la "vida buena", a la armonía social, al equilibrio entre los derechos de las personas y los de la colectividad, no puede ignorarse que las buenas maneras, la cortesía, la politesse humana, son indispensables para llegar a ellas. A nadie le gusta sentirse atropellado por una respuesta descortés, que en lugar de que le pidan permiso para pasar le den un empujón, que el prójimo le muestre los molares y la glotis mientras bosteza o que le estornuden en la cara.
Sucede, que una vez que nos acostumbramos a vivir incivilizadamente en asuntos tan nimios, luego seguimos con irrespetar la propiedad ajena, desobedecer las leyes de circulación o pretender imponer nuestro punto de vista en temas totalmente opinables.
Las buena maneras han sido, y deberán seguir siendo, el límite entre la civilización y la barbarie, entre la educación y la zafiedad, entre la dignidad del hombre y la vulgaridad. Dar por superados estos límites nos devuelven a la selva en la que pronto olvidaremos el caminar erguidos.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Estamos a la espera de un gesto de modernidad por parte del rey don Felipe VI, como el que sería la prohibición en el protocolo de las audiencias y actos oficiales de las reverencias, genuflexiones, inclinaciones, taconazos y toda clase de esos saludos
-
Los turistas chinos no parece que se comporten de forma correcta cuando salen de su país, o al menos así lo afirman algunos medios.
-
Tiempo ha, ocupábame yo de cosas de "protocolo" desde aquél Departamento de Conseguidores que fue el Gabinete de Relaciones Públicas, Documentación y Estudios del Ayuntamiento de Benidorm al inicio de los 90
-
Artur Mas no asiste al acto de entrega de los Premios Carles Ferrer Salat por no figurar como la máxima autoridad del acto
-
La visita del Presidente francés a EEUU acapara todas las noticias. Pero lo sorprendente es que no lo sea por la agenda de alta política, sino porque Hollande viaja sin acompañante.
-
El anuncio de la separación de François Hollande de Valérie Trierweiler ha hecho que el presidente francés vaya solo a los Estados Unidos
-
En tiempos no lejanos se enseñaba a los niños una línea de comportamiento que expresaba unas normas de conducta, "de urbanidad"
-
En tiempos del alcalde Vázquez, el protocolo municipal rebasó los límites de la solemnidad para adquirir ribetes cuasi monegascos
-
La experta en ceremonial y protocolo analiza el encuentro de Cristina Kirchner con Francisco... y uno de los dos sale perdiendo
-
El Metro a los parisinos: "Ayude al turista de la camisa floreada que se rasca la cabeza"
-
Una personalidad mediática y peculiar defensora de la buena educación, el saber estar y los buenos modales
-
Mucho se ha escrito esta semana sobre la visita que el nuevo Jefe del Estado español y su inefable esposa realizaron al Papa Francisco