Logo Protocolo y Etiqueta

Conversaciones y etiqueta para una tarde de té. Temas de conversación para una tertulia a la hora del té

Reunirse en torno a una taza de té puede ser una de las mejores formas de charlar sobre temas de actualidad

Se lee en 4 minutos.

Conversaciones y etiqueta para una tarde de té
Conversación tomando un té. Conversaciones y etiqueta para una tarde de té

Tertulias en torno a una taza de té. ¿De qué podemos hablar? Los temas de conversación

¿Tomamos un té y charlamos? Conversaciones al calor de una taza de té

Las reuniones a media tarde son una forma de charlar de forma desenfadada sobre temas de actualidad, principalmente. Son pequeños encuentros que se organizan entre amigos para pasar un tiempo en una agradable compañía.

Una invitación para tomar el té supone, en la mayoría de los casos, una cita con otras personas con las que vamos a tener que conversar. Al menos, hablaremos con una persona, seguro. Este tipo de reuniones son una buena manera de fomentar las relaciones sociales y mantener buenas amistades.

Si nos invita algún amigo o familiar, no vamos a tener ningún problema para entablar una conversación porque ya conocemos sus gustos, aficiones y los temas que pueden ser más o menos de su interés. También, es posible, tocar temas algo más personales si estamos entre personas de mucha confianza.

Cuando la invitación nos la hace alguien menos conocido, por ejemplo un nuevo vecino o compañeros de trabajo, es recomendable 'investigar' un poco sobre sus gustos y aficiones, así como cualquier otra información que pueda ser de nuestro interés. Por ejemplo, podemos fijarnos en su coche, en su jardín -si lo tiene-, en cómo viste, etcétera. Detalles que nos pueden dar algunas 'pistas' de su forma de ser y de sus gustos. Estos 'datos' nos pueden facilitar mucho abrir un tema de conversación con estas personas que a las que apenas conocemos.

Llegada de los invitados a tomar el té

Los anfitriones reciben en la puerta de su casa.  Se hacen los correspondientes saludos y presentaciones, y se pasa al salón, jardín, terraza o lugar donde esté todo preparado. No hay que entretenerse mucho tiempo en la puerta. Sobre todo si hay otros invitados en la puerta esperando para ser recibidos.

Al primer invitado no se le puede dejar solo, por eso le debe acompañar alguno de los anfitriones -o el anfitrión si es solo una persona-. Cuando ya van llegando más invitados -y una vez hechas las presentaciones- ya puede volver a la puerta para seguir recibiendo a sus invitados.

Sentarse donde cada uno quiera o mejor distribuimos los sitios

En este tipo de reuniones informales no suele tener un sitio asignado cada invitado, salvo los anfitriones. Por regla general, los invitados se suelen sentar alrededor de una mesa baja de salón, una mesa tipo camilla o bien una mesa de comedor. Depende mucho del sitio donde se vaya a tomar el té y del número de personas que se reúnan -aunque en este tipo de reuniones no se suelen juntar muchas personas-.

Si es en un espacio al aire libre, también se deben sentar cercanos para poder conversar. La conversación es el 'punto fuerte' de este tipo de reuniones.

¿Quién habla primero? ¿Quién propone un tema de conversación?

Los anfitriones sirven a sus invitados y comienzan abriendo la conversación sugiriendo algún tema, generalmente, de actualidad. Si es un grupo pequeño de invitados, participan todos de la misma conversación. Si es un grupo más numeroso, puede haber varias conversaciones diferentes. Los temas que se suelen tratar en este tipo de tertulias son temas de generalistas sobre la actualidad. Si son un grupo de amigos íntimos, los temas pueden ser algo más personales.

Los anfitriones, además de sugerir temas de conversación, deben encargarse de 'moderar' y evitar que las conversaciones tomen un 'rumbo' no deseado y deriven en disputas o enfrentamientos. Por esta razón, los temas de conversación no deben ser polémicos. Ciertos temas pueden llegar a estropear una agradable tarde entre amigos.

Mientras conversan, los anfitriones deben estar atentos para que no falte de nada en la mesa. También, cualquier invitado puede hacer alguna petición a los anfitriones. Por ejemplo, ¿puedes traer un poco más de azúcar? Por favor.

Si alguno de los invitados fuma, habrá que indicarle en qué zona puede hacerlo sin molestar a los demás. Si todos fuman, y los anfitriones están de acuerdo, se puede fumar en el mismo salón o comedor donde estén reunidos.

Durante la conversación hay que hablar y participar, pero también hay que saber escuchar. Debemos aprender a respetar todas las opiniones aunque no se compartan. También hay que procurar no interrumpir a la persona que está hablando.

Grupo de amigos toman el té y conversan
Conversaciones tomando el té. Grupo de amigos toman el té y conversan

Hora de las despedidas

Al finalizar la reunión, los invitados deben despedirse de los anfitriones y del resto de los invitados. Agradecer la invitación y las atenciones recibidas.

Por último, recordar que los anfitriones, pueden y deben, acompañar a sus invitados hasta la puerta, y no cerrarla hasta que hayan tomado el ascensor o bajado las escaleras -hasta 'perderles de vista'-. Si es una persona muy mayor o con alguna dificultad en su movilidad, la podemos acompañar hasta el portal, y esperar a que lleguen a recogerla -un taxi, un familiar, etcétera-. Si tenemos esa posibilidad, podemos ofrecernos a llevarle nosotros, uno de nuestros hijos o algún otro invitado con el que tengamos mucha confianza.

 

Su opinión es importante.

Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.

Contenido Relacionado